Septiembre 28, 2017
La Madre Naturaleza ‑de la que somos parte como especie orgánica- tiene una dinámica permanente y se refleja en múltiples Ciclos[1], [2], cuya duración es variable y existen casos en que por ser tan largos no es notoria o por su coteneidad no se les de mucho peso a excepción de alguna actividad particular como la agricultura.
Cada Ciclo puede tener diversas etapas de acuerdo a sus particularidades específicas como el del agua, el de alguna planta, la menstruación en el caso del género femenino o la rotación y traslación del planeta. En los Ciclos –en general- ocurren diversos eventos y cuya magnitud, duración y área de influencia directa e indirecta depende de la complejidad de la interrelación de múltiples variables que se conviertan en disparadoras –a toda acción hay una reacción- así como conductoras, aceleradoras, amplificadoras y otras como reductoras y amortiguadoras.
En los Ciclos de algunos de los elementos de la Naturaleza ‑como el aire, agua o capasgeológicas– se presentan eventos que se consideran extraordinarios de acuerdo a su magnitud y grado de impacto en la Sociedad, pero dicho calificativo también está influenciado por la longitud, amplitud espacial, cantidad de variables y detalles del registro que se lleva. Hay que tener en cuenta que un registro corto puede tener un evento que sea vea extraordinario pero conforme pase el tiempo se note que tiene una frecuencia de ocurrencia mayor o se corrobora como un evento particular.
En la actualidad la aparición de fenómenos naturales con mayor frecuencia algunos la asocian al impacto acumulado de la evolución humana y sus actividades y esta aseveración hay podría ser cierta en parte y hay que entender que cierta dinámica de la Tierra está presente desde su formación y de la cual hay información geológica y que los investigadores se encuentran según la profundidad con que excavan. Como muestra de cambios globales están las eras de hielo, la deriva de los continentes la variación de los niveles de los océanos y la influencia de la caída de asteroides en la dinámica planetaria. Lo anterior genera ecos a niveles regionales como locales y a los cuales aquellas especies que pudieron adaptarse –a nivel generacional- son las que continúan en la faz de la Madre Gaia.
Ante la dinámica anterior el ser humano no tiene mayor control de la misma y no tiene más opción que el tratar de entenderla y saber adaptarse a vivir en ella disminuyendo de esta forma los impactos producidos por los fenómenos extraordinarios que se presenten. Como parte de esto se entiende que ciertos eventos extremos tienen sus particularidades según sea el elemento –agua, aire o capas geológicas– sobre los cuales no se tiene un control para evitar o disipar dichos fenómenos una vez iniciados, sin embargo la falta de entendimiento de los tomadores de decisión[3] y las actividades subsecuentes de la Sociedad ‑a nivel espacial y temporal- determinan el grado de la vulnerabilidad así como los potenciales impactos a que estará sujeta.
De acuerdo a la ubicación de las actividades de la Sociedad y a las características locales como regionales se pueden presentar diversos fenómenos y con ellos diferentes impactos. Sobre la ubicación me refiero a la latitud y longitud. Con respecto a las características propias están los relieves, cadenas montañosas, valles, planicies, posición con respecto a las placas tectónicas, al borde de ellas o en el rango intermedio, la magnitud y dinámica de dichas placas, es zona costera plana o montañosa. Sumado a lo anterior se le añade el tema de la época del año ya que la termodinámica regional. como parte de la global cambian. Entre los fenómenos se tienen los del El Niño y La Niña[4] y a los cuales se les suma el desplazamiento de la Zona de Convergencia Intertropical[5] (ZCT), pueden actuar como disparadores de eventos relacionados con el aire y el agua.
A grandes rasgos como eventos regionales se tienen las ondas y depresiones tropicales, los huracanes, los frentes fríos, marejadas y tsunamis. A escala local se pueden presentar las tormentas, torbellinos, tornados y trombas marinas, las sequías, sismos –por subducción de placas o por falla local- y erupciones. Respecto al tema de las crecidas de los ríos, éstas están en función directa de las precipitaciones, su intensidad, duración tamaño del área donde caen y las características orográficas, como pendientes, tipos de suelos y cobertura.
El impacto indirecto, directo, parcial, acumulado y combinado de los eventos anteriores está en función de las variables naturales y las decisiones de la Sociedad como un todo y a nivel grupal e individual. A lo largo de la historia se han consecuencias muy fuertes en cuanto a pérdidas humanas y materiales y cuya recuperación depende de la Programación Cultural[6] a la que han estado sujetos los miembros de la Sociedad. Lo anterior define la capacidad de aprender e internalizar lo sucedido de experiencias previas –como de otros lugares- y que se reflejará en acciones de investigación y análisis para comprender la dinámica de la Naturaleza a toda escala y la interacción con las diversas actividades humanas. Un resultado del proceso anterior es la definición de normas y reglas que ayuden a reducir los impactos mediante acciones proactivas y las reactivas.
El alcanzar a tener nuevas reglas y ponerlas en práctica tiene un costo social, económico como político. En primera instancia tomar la decisión de estudiar el entorno de una forma integral y detallada aunque sean eventos que involucren dinámicas distintas como lo son mecánica de fluidos, hidrología, hidráulica, mecánica de suelos, geofísica, temas de infraestructura –no solo obra gris‑, psicología social y educación, por mencionar algunas líneas de estudio. En esta fase se requiere que se involucren diversas profesiones y entre ellas están meteorología, geología y diversas ingenierías. De igual forma se requiere todo un sistema de captura de datos en tiempo real y el levantamiento de información de campo. Dichos sistemas involucran el diseño, instalación, operación y mantenimiento de redes hidrometeorológicas como geofísicas, acceso a imágenes de satélite e intercambio de información con entes internacionales.
Una vez recopilada una amplia base de datos, durante las últimas décadas los diversos especialistas han venido desarrollando herramientas –modelos matemáticos- que permitan simular el posible comportamiento de los eventos y con base en ello realizar pronósticos con un cierto grado de confianza, el cual puede variar según sea el elemento y el evento.
Como se ha observado con el tema de fenómenos meteorológicos se hacen proyecciones de cómo puede variar la dinámica de los mismos y sus posibles trayectorias dando un tiempo de preparación para las comunidades que pueden ser afectadas. A nivel local el tema de torbellinos, ráfagas rápidas, tornados o lluvias localizadas el tiempo de prevención se puede reducir.
Respecto a la parte geofísica, el pronosticar sismos o erupciones es algo que aún no se ha alcanzado, sin embargo la información permite identificar el riesgo de ciertas áreas sufrir un evento, el inconveniente que existe es que un sismo se genere por una falla local no identificada o de la que no se tiene registro. Histórico validado. Acerca de los sistemas de alerta estos están en función del tipo y potencial origen de un sismo, de la amplitud y distribución de la red de sensores y la distancia a la comunidad que quiere ser alertada. Independiente de lo anterior y de manera informal me he enterado de que se desarrollan modelos de magma y otros esfuerzos con otras variables para monitorear la dinámica de las placas tectónicas en sus bordes y con ello hacer identificación de riesgos.
De los eventos locales que tienen una mayor opción de ser previstos y crear un sistema de alertas son las crecientes de los ríos y sus áreas de inundación, tanto rural como urbano.
En este último tipo de evento –como en los demás- el grado de impacto ha variado y rapidez con que se da, ha variado en el tiempo y sobretodo en el desarrollo urbano que se haya realizado con planificación o sin un fundamento integrado en cuánto a la probable ocurrencia de eventos, decisiones político-administrativas sobre el uso del suelo ‑a escala de municipalidades[7] – y el impacto acumulado de los mismos. Un caso de estos son las infraestructuras antiguas que se diseñaron con base a diversas suposiciones que se quedaron sin fundamento al ampliarse la mancha urbana y cambiando los usos del suelo. En ejemplo son áreas que se inundan con mayor frecuencia que hace décadas y sucede con precipitaciones de menor intensidad y duración. Obras de conducción de aguas que se proyectaron para una vida útil o riesgo de falla se alcanzó más rápido de lo proyectado[8].
Los fenómenos extraordinarios generan diversos efectos durante su tránsito en diversas zonas, el viento y su fuerza tiene la capacidad de desprender materiales e inclusive de demoler según la fragilidad de la obra y con ello convertir en proyectil cualquier cosa y lanzarlo de manera aleatoria contra cualquier obstáculo o persona que se encuentre sin resguardo. Las lluvias asociadas a los diversos eventos meteorológicos crean las crecientes con capacidad de erosionar márgenes colapsar obras de infraestructura inundar diversas áreas y arrastrar lo que se encuentre en ellas así como ser un agente disparador de deslizamientos. Los sismos generan caída de elementos así como de obra gris de diverso tipo, no solo estructura vertical –edificios- sino que también el colapso de obra vial como carreteras y puentes de autopistas como obras hidráulicas.
Aparte de las consecuencias en infraestructura lo cual se traduce en problemas de comunicación y transporte y el suministro de servicios básicos como agua y electricidad, se dan los efectos sociales a nivel individual y grupal como es el miedo, lo que puede derivar en pánico, según la persona y transformarse en anarquía según el tipo de evento, el lugar, la hora y la cantidad de individuos presentes. El evento que mayor impacto psicológico genera son los sismos y además de estos están las crecientes rápidas de ríos como las avalanchas y deslizamientos. Otros que pueden actuar con sorpresa para los habitantes son las ráfagas de viento y torbellinos y sobre todo cuando se ve que desprenden las láminas de un techo o toda la estructura, además de la caída de árboles.
Posterior a los eventos viene la fase de asistencia a los afectados damnificados por medio –en teoría- por una logística y personal preparado para ello todo bajo un proceso de coordinación integral el cual concatena e integra a diversos entes públicos y privados, estos últimos de forma voluntaria, así como el apoyo de otros países. En este proceso una de las primeras acciones es el diagnóstico para calificar áreas según el impacto y en lo cual se valora la facilidad del transporte para llegar a dichos lugares y brindar el soporte necesario Como parte de los elementos a considerarse son el riesgo de combinación de eventos y las opciones a considerar para minimizar la pérdidas de vidas humanas. Combinaciones de eventos pueden ser sismos y tormentas o al revés, también sismos y réplicas fuertes por mencionar algunas..
La identificación de riesgos y fragilidad de zonas e infraestructura es necesaria, no solo por nuevos eventos y el tema de colapso sino también para la ubicación de zonas para albergues temporales, tanto en estructuras ya construidas como en carpas y tiendas de campaña así como en centros médicos móviles. De igual manera se debe contemplar el lugar de estadía para el equipo humano de apoyo así como herramientas y materiales que son trasladados a las diversas zonas afectadas.
Parte de los criterios para dicha escogencia de lugares están la facilidad de acceso para el suministro de alimentos de todo tipo y el traslado de urgencia a otros lugares. De igual forma puede aplicar el espacio para necesario para el transporte aéreo con helicópteros. Lo anterior incluye el tema de ubicación y administración de los centros de acopio.
Otro proceso inmediato es la calificación de todo tipo de infraestructura, vertical como horizontal, pública como privada. De hábitat y vías de comunicación así como de servicios públicos que no sufrió daño y puede seguir operando, la que requiere ser arreglada y la que debe ser sustituida de forma inmediata.
En lo que también se debe tener un control es en la gestión de la información ya que con la tecnología actual y la anarquía presente durante y posterior a los eventos se generan procesos de desinformación lo cual acentúa el caos y puede generar conflictos entre actores. De igual forma deben de haber medidas de seguridad para la protección de civiles y bienes ya que se pueden presentar desatenciones de ciertas áreas en las cuáles pueden aumentar el tema de robos.
Con base a lo anterior, analizando esto, se crean las bases para ver qué alternativas se pueden crear para reducir los riesgos tomando como prioridad la vida humana y luego la sostenibilidad de la Sociedad. Algunos productos son los mapas de riesgo y si el uso actual del terreno es el adecuado para ello. Identificar a quién le corresponde la responsabilidad legal y administrativa de hacer los cambios, ya sea a nivel de reglamentos y operativos, la búsqueda del sustento económico en caso de que es necesario el traslado de zonas residenciales que por cambios de condiciones ahora se encuentran en áreas de riesgo o valorar la alternativa del levantamiento de algún tipo de infraestructura para reducir o anular el riesgo. ¿Cuál es la mejor opción desde el punto de vista social, económico, político y ambiental? ¿Desde cuál punto de vista de un afectado, de un técnico o de un político?
Otro producto son las normas de construcción, el uso de materiales, las calidades de los mismos y su combinación, en el caso de obra gris- para resistir a los esfuerzos que estarán sujetos, como unidades y conjuntos, y que de acuerdo a su propósito como obra: residencia, edificio, bodega, acueductos, puente alcantarilla, red de transmisión y distribución de electricidad, presa, etc.-, tengan la capacidad de ser flexibles para disipar energía y recuperen su forma original o que se deformen sin colapsar dándole la oportunidad a los usuarios de de salir reduciendo así la pérdida de vidas humanas y en segundo plano mantener la funcionalidad de las mismas sin mucho deterioro..
El de normas de diseño y construcción pueden establecer límites mínimos de resistencia y deformación, dichos valores pueden ser de carácter obligatorio u opcional según la legislación de la Sociedad. De acuerdo a la región así puede prevalecer la ocurrencia de múltiples o solo unos cuántos tipos de eventos y de cierta magnitud lo cual sienta las bases de las normas.
Depende de la división político-administrativa pueden obligatorios a nivel de un país, solo de un estado, etc.
Si es una región sísmica usan para las reglamentaciones la magnitud de un evento con un período de recurrencia determinado, en principio en función de la zona así son los rangos de valores medios y máximos registrados y de acuerdo al nivel de seguridad, por ejemplo, los que escriben las normas pueden indicar que se basan los diseños para un sismo que tiene una probabilidad de ocurrencia –según el análisis estadístico- de una vez cada 500 años. El que se use una frecuencia menor o mayor reduce o aumenta la magnitud de los esfuerzos a los que va a estar sujeta cada parte y como un todo la estructura.. En principio se vela por la reducción de la pérdida de vidas pero pasando a otro aspecto se asoma la pregunta ¿A cuánto equivale en presupuesto de construcción la diferencia de los límites? Si las normas son obligatorias ¿Qué tan atractivo es para los inversionistas externos desarrollar sus obras allí? ¿Cómo se entiende por parte de todos los actores el tema de seguridad-mínimo daño o colapso-demolición-retiro? En esto también entra el juego del tiempo para recobrar la normalidad operacional de los centros urbanos como los rurales ¿Cuáles zonas relaciones beneficio neto de forma parcial en los sectores sociales, económicos y ambiental como el integral?
Una actividad a desarrollar que se considera como imprescindible para la infraestructura y su futuro es lo que se puede denominar como ingeniería forense la cual consiste el entender que tanto han resistido, cuáles fallaron y cuál es la causa del fallo. Como parte del estudio y/o autopsia estructural podrían hacerse algunas preguntas como: ¿Cuál es su antigüedad? ¿Cuáles normas rigieron el diseño y la construcción? ¿Si es tan reciente por qué falló? ¿s factible seguir la huella de responsabilidad diseño-aprobación-construcción-observación-cumplimiento-entrega-uso? En otro aspectos ¿Es necesario revisar las normas ya que cambio la estadística según el registro histórico? Un caso de este último es lo recién sufrido por México, en término e 10 días tuvieron sismos muy fuertes de ellos pueden ser considerados como terremotos ‑8,1º y 7,1º de magnitud Richter lo particular es que el segundo ocurrió en un lugar donde no tenían mayor información y mucho más cerca del Valle de México. Algo similar sucedió en Costa Rica en 1991, la zona del Caribe sur no tenía registros de sismos fuertes y en abril superior a los 7º de magnitud lo cual no contemplaban las normas de la época y como consecuencia fueron revisadas.
Aparte del tema de reactivación estructural está presente la recuperación social, no sólo económico sino emocional. Todo individuo está sujeto a diversos niveles de preocupación de acuerdo al tipo de evento y el nivel de alerta preventivo para que valorice sus opciones de mitigarlo o evitarlo con el menor riesgo a su vida y calidad de la misma. Durante el evento, si lo tiene que vivir, ya depende de su consciencia y educación para saber manejarse en dicho período, ya sea en un ambiente público o familiar, ya sea solo en compañía de otros, ya sea para seguir su propio criterio o seguir las instrucciones de otros. Posterior al evento cada uno hace un recuento y evaluación de lo sucedido en cuanto al balance material y cuán importante y valioso es para su calidad de y con ello la vida de sus semejantes. Según la personalidad los impactos materiales así como de vidas de otros se traducen en heridas emocionales para lo cual requerirán, por decisión propia o a instancias de terceros- un apoyo psicológico y el plazo de dicho soporte lo definirán los especialistas respectivos. Asociado al trauma emocional está el físico el cual corresponde a un daño temporal o permanente que inhabilite o no a la persona desempeñar las labores que le sustenten la vida. En esto también puede aparecer el tema de equipo de apoyo para los heridos por el evento.
Un efecto emocional posterior se genera en aquel segmento de la población que termina en albergues temporales. En dichos lugares la falta de espacio, la fragilidad de los mismos ante eventos meteorológicos, las condiciones individuales y el tiempo que pasen en dichos lugares sin opción a reubicarse crea ansiedad y desesperación que de no ser satisfechas, según las fortalezas y limitaciones de los entes responsables, abre la puerta a conflictos grupales. ¿Cómo se atiende y da seguimiento a grupos de la tercera edad como jubilados que se quedaron sin su apartamento? ¿Y en el caso de los discapacitados?
Otro efecto combinado es emocional-habitacional- y versa sobre el colapso de estructuras económico –residencia, comercial y lo que representa la experiencia vivida y lo perdido en el evento. Una consecuencia es el negarse a volver a usar dicho tipo de estructura, el temor que queda arraigado en la persona, la posible tendencia a migrar en búsqueda de desarrollos horizontales por mayor seguridad y mantener una propiedad como valor de salvamento. En esto último de acuerdo a como sean las leyes de la nación en cuanto a propiedades quién es dueño de un apartamento o espacio en el edificio y falla –se declara inhabitable o colapsa- la pregunta que aparece es: ¿De qué es dueño? ¿De un pedazo de aire o de un fragmento del lote? ¿Hay garantía para reclamarla? ¿Y si está hipotecado? Cabe mencionar que un impacto acumulado –al haber migración- implica la expansión de la mancha urbana de forma horizontal, ya sea en el mismo lugar o en otras regiones. Sumado a esto está el asunto del cobro de seguros y la revisión de criterios para asegurar dichas obras –de manera fraccionada- por parte de las empresas del ramo.
Con lo anterior situación surgen otras preguntas; ¿Existe el capital humano en cantidad, calidad y disponibilidad? ¿El sustento logístico y económico quiénes lo proveen? ¿Para aquellos que no tienen capacidad económica quién les apoya? ¿En caso de necesidad real los centros académicos darán el soporte como una acción de responsabilidad social bajo una coordinación central?
Para ir concluyendo, esta rápida revisión, cabe mencionar el tema de los residuos líquidos y sólidos que se generan después del evento. Cómo línea de acción está la identificación de los lugares de origen, el tipo, su toxicidad, su volumen, su facilidad o dificultad. Opciones de recolección –medios de transporte y vías abiertas- lugares donde dejarlos e impactos locales por dejarlos allí. La revisión de cauces y sistemas de alcantarillado debido a los riesgos de inundación y avalanchas. ¿Están definidos los entes responsables de inspección, ejecución y seguimiento? ¿Cuál toma la decisión final en caso de conflicto de intereses y prioridades?
Todo el ciclo anterior –antes, durante y después- en el cual se envuelve el proceso de diagnóstico, entendimiento y producto reales como; modelos de análisis, sistemas de prevención, normas y protocolos, reducción de riesgos e impactos, sostener el nivel y calidad de vida de la Sociedad, se traduce en un sustento económico permanente para las líneas de operación y mantenimiento como la de renovación y evolución en el tiempo y con esto aparece la pregunta ¿quién y cómo se paga?, lo que lleva al debate qué tan detallado se requiere y cuáles son los beneficios tangibles de todo ello y en esto se produce el choque entre la parte tecno-científica y la de los tomadores de decisiones[9] sumándose a ello los Muros Mentales[10] presentes en los diversos sectores, grupos e individuos que no permiten entender la Gestión Integrada del Sistema Sociedad – Naturaleza.
El fundamento de las disputas entre actores se basa en la falta de la normalización y entendimiento e conceptos y validación de criterios, tanto técnicos como de importancia e interés socioeconómico a diversas escalas como temporales.
El entender el antes, el durante y el después le permite a la Sociedad a revisar lo que se tiene, que ocupa ser modificado y la manera de hacerlo para tener un desarrollo sostenible considerando la ocurrencia de fenómenos naturales y de cómo reducir y amortiguar los impactos. Los supuestos usados en cuanto a la dinámica de la Naturaleza han cambiado por su misma cinética como por la alteración de ecosistemas y uso del suelo en las hábitats levantadas por el ser humano y el no entender dichos cambios las hace frágiles y vulnerables a los eventos naturales.
(*) Ing. Marco A. Jaubert Vincenzi, M.Sc.
[1] Jaubert, M. 2016. El Agua Urbana y el Clima Suministro ¿Sostenible.
[2] Jaubert, M. 2017. 9: ¿Enigma Cultural, Matemático o Místico.
[3] Jaubert, M. 2015. Decisiones e Impactos en el Desarrollo.
[4] Son fenómenos que indican que la temperatura de los océanos ha variado. la Sociedad.
[5] Área donde convergen los vientos alisios de los hemisferios norte y sur.
[6] Jaubert, M. 2014. El Arte del Manejo de los Grupos por Medio del Manejo de la Información.
[7] Jaubert, M. 2014. La Persona, la Sociedad y la Ciudad ¿ Inteligente?.
[8] Jaubert, M. 2013. Ríos Urbanos y Colapso de Infraestructura para.
[9] Jaubert, M. 2015. Decisiones e Impactos en el Desarrollo.
[10] Jaubert, M. 2015. Desarrollo: Los Muros Mentales y la Naturaleza.