
¿Cómo hacer, estimados cuatro o cinco lectores, para que las ciudades de la República Mexicana, sean habitables? Ya que, salvo honrosas excepciones (Mérida, Querétaro, quizá Puebla), no las hay en el país. Y por habitable entiendo lugares agradables, con alta calidad de vida, en todos sentidos.
Está el caso de la hoy absurdamente llamada oficialmente (porque a nuestro país lo conocemos como “México”, porque hay una entidad federativa llamada Estado de “México”, y porque ahora existe una ciudad, que no es entidad federativa pero que se llama igual, “México” ) Ciudad de México (CdMx), que es modelo para otras ciudades de la nación pero que desde hace tiempo, dejó de ser un sitio habitable.
Porque la hoy CdMx, es un sitio con un medio ambiente muy contaminado, con un permanente tráfico infernal, semejante a un inmenso y saturado estacionamiento de vehiculos automotores, con excremento canino por todas pares y basura en gran parte de la ciudad, con un ejército de desempleados, disfrazados de subempleados (se nota porque la cantidad de tianguis y vendedores ambulantes, crece día a dia), con alta inseguridad pública, con el crimen organizado en ascenso, con sus cárceles saturados de tanto preso, con corrupción galopante, con servicios públicos deficientes, con hospitales saturados de enfermos debido a sus instalaciones, equipo y personal insuficientes, con transporte colectivo totalmente deficiente e insuficiente, con falta de agua potable instalada, en muchas de sus colonias, con servidores públicos (y, en general, con una clase politica),improvisados quienes generalmente tratan a los gobernados como clientes y no como ciudadanos.
Los habitantes de la otrora “Ciudad de los Palacios”, sobrevivimos porque nos hemos convertido en una especie de mutantes: Todos con stress, todos con neurosis, todos desconfiando los unos de los otros, todos corriendo de un lugar a otro, como enloquecidos, todos despojados de las más mínima solidaridad para con el semejante, todos cuidandose a su propia manera de la inseguridad cotidiana, todos delirantes, en busca del pan de cada día.
Y es que se trata de una ciudad, la de México, que ya no resiste ni los aguaceros de la temporada. Cada que llueve, hay inundaciones y damnificados por doquier. Quizá por ahí debiéramos empezar, por reconocer que quien manda es la naturaleza y, por ende, que en lugar de tratar de acabar con ella, hay que aprender a convivir con su existencia. Es decir, lo que procede para construir ciudades habitables es, en primer lugar, aprender a vivir con la naturaleza.
No es una tarea fácil. La depredación tiene siglos de iniciada.
Al menos desde 1521, cuando cayó lo que fuera la gran Tenochtitlán en manos de los españoles, luego con los criollos, y actualmente con los actuales chilangos y fauna que nos acompaña, el territoiro de lo que hoy es una ciudad inmensa, ha sido despojado de su naturaleza. Lo que fueran cinco grandes lagos – Texcoco, Xochimilco, Zumpango, Chalco y el mismo Tenochtitlán – alimentados por unos 45 caudalosos ríos, e inmensas extenciones de bosques y selvas, y hasta cerros completos, han sido sustituidos por una grandísima (de unos 1500 kilómetros cuadrados) selva de concreto, descomponiendo todo, empezando por la calidad de vida, de quienes la habitamos.
De aquellos grandes lagos, solo quedan las sobras o nada, como es el caso del central. El de Texcoco, desde los años cincuentas del siglo pasado, ha tenido que ser medio rehabilitado. El de Zumpango tambien. Del de Chalco casi nada queda, igual que el de Xochimilco. Y todos los ríos han desaparecido. O solo quedan los nombres o estan entubados o enterrados o convertidos en aguas negras. Por eso el 100 por ciento de la lluvia, que es el “alimento” natural de ríos y lagos, por mucha que caiga, millones de litros de los actuales aguaceros, se desperdicia. Paradójico en un lugar sediento.
Tal vez, ahora que se discute la aprobaciòn de una Constitución local, debiéramos pensar en reconstruir sobre bases civilizadas, esta Ciudad tan grande. Y lograr que en dicho documento quede como oblgación de todos, cuidar y convivir con la naturaleza. Por ejemplo,impulsando políticas públicas para rehabilitar algo mas de aquellos grandes lagos, y recuperar algunos de aquellos caudalosos ríos.
Estaría bien que alrededor de la Ciudad, como un periiférico, se construyera un río a manera de acuaférico que se añadiera a lo que aún es el río de los remedios, y, además, enmedio de la CdMx, quizá en lugar del actual Viaducto Miguel Alemán y sus afluentes, hubiera un río mas, que iniciaría en lo que hoy es el río de la Magdalena y concluiria por el rumbo de Pantitlán, para alimentar lo que hoy es el rehabilitado lago de Texcoco. Ello para empezar. Todas las grandes ciudades del mundo tienen su río que las atraviesa. Y son navegables y estan limpios. ¿Por qué la de México no lo tiene?
Podrían construirse también, parques como el Tezozomoc, de la Delegaciòn Azcapotzalco, con su lago y toda la cosa: Uno por Delegación; Volver a abrir grandes camellones y amplias banquetas, como antaño, con todo tipo de vegetación sembrada, para que en lugar de que el agua de la lluvia se desperdicie en el drenaje de aguas negras, se filtre al subsuelo para alimentar lo que hoy aún son ríos subterráneos y…
Con dichas obras, el impacto benéfico en el medio ambiente de la gran ciudad, seria inmediato. Y en la salud de sus habitantes tambien. … se acabarian las inundaciones y grandes encharcamientos, se fortaleceria el gran turismo, habría agua potable para todos los habitantes, se ahorrarian grandes cantidades de dinero que hoy se usan para traer agua desde cada vez mas lejos, y se invertiría en solucionar otros problemas…
Claro que para ello,hay que pasar sobre los criterios estrechos y chatos de los actuales servidores públicos capitalinos, como los titulares de la Secretaria del Medio Ambiente, que no ata ni desata la pobre, y del del Sistema de Aguas de la CdMx, al que para evitar encharcamientos e inundaciones provocadas por los aguaceros, solo se le ocurre proponer que “toda la tuberia de la Ciudad, sea sustituída por nueva”. Cierto que haría falta la participaciòn conciente de todos los habitantes de la gran ciudad, para hacerla habitable, con medidas como las señaladas. Sin eso, no se podría.
¿Cómo la ven desde ahí, mis estimados y estimadas? Sin albur eh.
Notitas: Una.- Que se agradece la comprensión y la paciencia de mis cuatro o cinco lectores, al esperar tres largos meses, a que volviera la inspiraciòn de este opinólogo, para seguir publicando estos mamotretos, luego de mi gran pérdidea personal sufrida. Dos.- Que se miran raras las televisoras Televisa y Tv Azteca, sin notas e imágenes de los Juegos Olimpicos de Brasil. Y es que don Carlos Slim les comió el mandado y… Tres.- Que se invita a la Conferencia del Dr. José Woldemberg K., titulada, “La Democracia Mexicana”, la cual se lleva al cabo el martes 9 de agosto, en Concepción Béistegui 107, colonia del Valle, en la CdMx, (a dos calles de Insurgentes sur, a la altura del Poliforum) a las 19 horas. Organiza: “Por el Cambio con Dignidad, AC”. Cuatro.- Que se agradece a don Edmundo Cepeda Delgado, productor y conductor del programa “No Hagan Ruido, Música”, de Radio Educación, su gesto solidario, pues el pasado 17 de julio, prácticamete dedicó su espacio, ¡una hora!, a leer varios relatos de mi libro “Cuando correteábamos utopías”, con créditos y toda la cosa. Cinco.- Que ‘por cierto, ademas de adquirir dicho libro directamente con este autor-editor, tal texto ya se puede comprar en los domicilos del centro de Coyoacán y el de Miguel Ángel de Quevedo, en la CdMx, de la librería El Sótano, pues sus encargados me dijeron: “…te vamos a hacer un pedido y…”, va. Seis.- Que quién sabe cómo le hizo el ex Jefe de la policia del Gobernador de Veracrúz, para ser propietario de 19 inmuebles, incluidos algunos en EU, y 24 prósperas empresas. A menos que sea cierto que en realidad él es prestanombres de su jefe, don Javier Duarte. Siete.- Que igual, uno se pregunta, ¿cuánto costó a los contribuyentes capitalinos, vía la tesoreria del Gobierno de la CdMx, la entrevista a modo durante una hora (mas otra hora de repetición) del Jefe de Gobierno, don Miguel iÁngel Mancera, en el programa El Último Pitazo, del canal televisivo 152, de Multivisión, en sus ediciones nocturna del jueves 4 de agosto y matutina del viernes 5? Y eso que no se valen las campañas presidenciales fuera de tiempo legal,eh.
Correo E hernandez-jimenez2012@hotmail.com
México, Ciudad de México, a 6 de agosto de 2016.