
Los asalariados que hoy venden su fuerza de trabajo deben transformarse, de acuerdo a sus capacidades y posibilidades, en socios activos, para que las utilidades tengan carácter social y cada quien obtenga los beneficios equitativos de acuerdo a lo que aporte en el proceso de producción. Que nadie se beneficie injustamente del trabajo de otros. Las empresas como las tierras deben ser de quienes las trabajan y las cuidan, en la proporción en que lo hacen. El MTS estudia la historia del movimiento cooperativista e impulsa la formación de cooperativas como alternativa esencial para superar el modo de producción capitalista. El MTS lucha por disminuir gradualmente las jornadas de trabajo y ampliar el tiempo para la recreación, las expresiones afectivas y la creatividad de todas las personas, abriendo también mayores posibilidades para la convivencia y participación políticas.